mi
tranquilidad se sienta en amar como se ama a la vida
en perseguir hasta el último nunca el deseo que mueve mi mundo
mi hacer ser
no se trata de ganas que van se van revuelven u ocultan
no se trata
de culpas
la trampa
está puesta en la
propia certeza, en la propia cordura
no hay
sombra desierta de luz
sólo salva el deseo
con sus
pliegues / sus velos
el deseo
profundo no emerge del miedo
se incrusta
a martillazos
se muere
hasta la vida de saber adónde voy